¿PODRÍAMOS VER SUBIR AL DOW JONES A LOS 38.000 – 38.500 PUNTOS?

Decíamos la semana pasada que la estructura de las bolsas desde el pasado 29 de marzo es de consolidación tras las fuertes subidas previas, lo cual equivale a decir que se están moviendo de forma lateral sin generar tendencia sostenida ni al alza ni a la baja. Pero quizás le quede poco tiempo en esta fase, pues varios índices bursátiles muestran unos primeros síntomas de querer volver a reanudar la marcha alcista, como son el Dow Jones, el Nikkei o el DAX. Pero ni el SP ni el Nasdaq han confirmado esta pauta, por lo que quizás quede algo de corrección de corto plazo antes de reanudar la senda alcista. 


Pero antes de seguir con la revisión de otros mercados financieros, queremos mostrar una posible alternativa que no descartamos para el medio plazo. Concretamente, uno de los escenarios que barajamos es que el Dow Jones pueda escalar durante las próximas semanas a la zona de los 38.000 – 38.500 puntos, tal y como ilustramos en el siguiente gráfico de 2 semanas:

Esto sería así en línea con una posible formación de triángulo expansivo que no está confirmada, y que vendría representada por las directrices dibujadas en color rojo discontinuo. Por arriba, vemos la consecución de máximos crecientes, y por abajo vemos la consecución de mínimos decrecientes, formando un triángulo abierto tal y como se ve en la imagen. Si esta formación técnica se fuera confirmando, veríamos al Dow ir a buscar la parte alta en la zona de los 38.000 – 38.500 puntos, para desde ahí volver a caer a la parte baja de la formación


¿Y tendría esto sentido en línea con el grave escenario macro en el que nos encontramos, con riesgo muy elevado de estanflación, políticas restrictivas de los bancos centrales con reducción de balance y tipos al alza, guerra en Ucrania, etc etc..? Pues sí lo tendría por dos razones. En primer lugar, porque el mercado no suele estar sincronizado con la realidad económica, sino que lleva su desfase temporal. Además, si el sentimiento predominante es bajista como el actual, por la teoría de la opinión contraria toma mucha probabilidad que el mercado no acabe cayendo sino todo lo contrario: subiendo. 


Y en segundo lugar, porque las formaciones de triángulos expansivos suelen ser figuras de cambio de tendencia, pasando de alcista a bajista, y en este sentido cobraría mucho sentido. Hemos tomado el siguiente ejemplo de cómo podría desarrollarse la formación de triángulo expansivo, en la que se ve que al final de la formación y una vez confirmada con la pérdida de la directriz bajista, los precios tenderían a caer con mucha fuerza, algo que estaría en consonancia con la realidad macro que todos estamos viendo

Pero esto que acabamos de desarrollar es sólo un posible escenario que iremos viendo si se va confirmando o no. Por el momento nos quedamos con que los índices están buscando la salida al alza de la fase de consolidación aunque quizás le quede algo de recorrido a la baja, y tanto el SP como el Nasdaq todavía no habrían confirmado este movimiento. 


Por su parte, el mercado de bonos está formando un suelo de corto plazo bajo nuestro punto de vista. Decíamos la semana pasada que el que no haya vendido ya los bonos de su cartera, podría esperar y no hacerlo ahora, ya que pensamos que el rebote está a la vuelta de la esquina. Por esta razón, el color asignado en el mapa de activos es el amarillo, ya que ahora no sería un buen momento para vender. 


Nuestro punto de vista sobre el mercado de bonos es el siguiente para la inversión a medio plazo: no es momento de comprar ahora; no es momento de vender ahora, sí lo será más adelante; vamos a por un rebote de corto plazo que corrija la elevada sobreventa que hay, para luego volver a caer, ya que la estructura de medio plazo de los bonos es bajista y las perspectivas a medio plazo son muy desfavorables.  


Un gráfico que nos puede ayudar a ver el momento en el que nos encontramos (ya vimos la estructura del bund alemán, del bono de EEUU a 10 años o el de 30 años), es el de las notas a 2 años de EEUU. Tras la caída violenta que hemos vivido, ahora ha encontrado un apoyo en la zona horizontal dibujada con trazos azules, desde donde probablemente experimentará un rebote de corto plazo.

Por esta razón seguimos sin nada de renta fija en las carteras, a excepción de los bonos ligados a la inflación euro, sobre los cuales todavía mantenemos una previsión favorable. 
La distribución de activos sigue siendo la misma para nuestras carteras y no hay cambios, tal y como se muestra en nuestra tabla de Asset Allocation Dinámico: 

Y los activos seleccionados siguen siendo los mismos, tal y como se muestra a continuación: 

Y dentro de bolsa emergentes, nuestra inversión está materializada en Bolsa Latam, que sin duda es la más fuerte de todas las emergentes. 


Por último, señalar que nuestras tres carteras cotizan en máximos, con un comportamiento «francamente creciente» desde su inicio el pasado 1 de enero de 2020, con crecimientos sostenidos y sin grandes sobresaltos del 9,91% desde el inicio para la cartera creciente conservadora, del 21,36% para la cartera creciente moderada y del 33,65% para la cartera creciente dinámica. Las rentabilidades anuales se muestra a continuación:

Un saludo a todos!